La curiosa historia de Jimi Hendrix teloneando a "The Monkees"

Fue una combinación tan breve como extraña: En el verano de 1967 los iconos musicales Jimi Hendrix y "The Monkees" formaron un acto musical en el que el legendario guitarrista abría el espectáculo para la sensacional 'boy band', según recuerda el baterista de "The Monkees", Micky Dolenz, cuenta la serie de YouTube Great Big Story.

En aquel año, la guerra de Vietnam estaba en apogeo, Lyndon B. Johnson gobernaba Estados Unidos y el mayor acto musical era "The Monkees". También ese año se produjo un encuentro casual en Greenwich Village (Nueva York) que inició uno de los más extraños y nefastas interacciones de la cultura pop de la historia: la guitarra de Hendrix y la melodía de "The Monkees".

 

"Alguien dijo, tienen que venir abajo y ver este increíble guitarrista que la toca con los dientes. No había ningún nombre asignado, nada", recuerda Dolenz. Aquel músico 'sin nombre' era Hendrix, el ahora leyenda del rock and roll. 

Fue en junio de aquel extraño año, durante el Monterey Pop Festival (en California), cuando Dolenz vio sentado desde el público la presentación de Hendrix -una de sus primeras grandes apariciones en Estados Unidos-. "Solo recuerdo ir, y decir ¡ese es el tipo que toca la guitarra con los dientes!"

Quedó impresionado. Todo el mundo lo estaba. Es así que Dolenz le dice a los productores de su banda que tenían que probar un espectáculo del guitarrista como el acto de apertura que estaban buscando. 

Las diferencias de estilo eran más que evidentes, pero se llegó a un acuerdo. "Efectivamente, el acto de apertura de "The Monkees" fue Jimi Hendrix Experience". Viajaron juntos en una gira de conciertos; pero los seguidores de la banda no sabían bien cómo reaccionar a las demostraciones de Hendrix. 

Mientras Hendrix tocaba, el público gritaba "Queremos a 'The Monkees'". Fue vergonzoso para Hendrix hasta el punto que solo soportó la situación en siete recitales. Según Dolenz, existe el rumor que en el último concierto, el guitarrista se retiró insultando al público. La sociedad había terminado tan pronto como su rareza lo demandaba.

Pero Hendrix brilló hasta el extremo de ser considerado por millones el mejor guitarrista de rock and roll de la historia. Solo dos años después fue el artista mejor pagado en el Festival de Woodstock. Y "The Monkees" le queda el consuelo de haber 'aportado algo' a aquella carrera.